Centro neurálgico Radical
La Sociedad de San Pío X, que tiene capillas y escuelas a lo largo de todo Estados Unidos, contina siendo una fuente de propaganda antisemita.
El centro neurálgico del mundo Católico tradicionalista radical es una orden internacional en expansión, llamada la Sociedad de San Pío X (SSPX), y fundada por el fallecido arzobispo, Marcel-François Lefebvre, en 1970. Aunque ha habido intentos recientes por parte del Vaticano de incorporar a la SSPX al Catolicismo oficial, la organización, cuyos obispos fueron todos excomulgados a fines de los años 80, ha seguido publicando materiales antisemitas, dejándose tentar por la negación del Holocausto y rechazando cualquier reconciliación con la Iglesia Católica.
Lefebvre estuvo siempre en la derecha inflexible. Durante la Segunda Guerra Mundial, apoyó al régimen pro- nazi de Vichy, gobierno títere de la parte de Francia no ocupada por los alemanes. El arzobispo lamentó la posterior liberación del país, y la describió como "la victoria de la Francmasonería contra el orden Católico de Petain. ¡Fue la invasión de los bárbaros sin creencias ni ley!"
Lefebvre estuvo después en el comité asesor del Concilio Vaticano Segundo (1962-65), que aprobó varias reformas modernizadoras y liberalizadoras dentro de la iglesia. Pero el arzobispo se negó a firmar los informes finales del concilio sobre libertad religiosa y la iglesia moderna, la primera señal de una rebelión que sólo iría a prosperar en años posteriores. En 1970 fundó la SSPX como un seminario en Ecône, Suiza.
En 1974, Lefebvre denunció públicamente como heréticas a las reformas del Vaticano II y a la posterior adopción de la nueva Misa, celebrada en idiomas locales en lugar del latín tradicional. Como resultado, el Papa Pablo VI le ordenó cerrar el seminario de Suiza. Pero Lefebvre se rehusó llevando al Vaticano a suspender su derecho a realizar funciones sacerdotales (paso próximo a la excomunión) en 1976.
En 1988, Lefebvre dio un paso todavía más radicalizado: consagró a cuatro obispos en desafío al Vaticano. El Papa Juan Pablo II respondió con la excomunión de Lefebvre y de todos los sacerdotes de la SSPX, y declaró a la misma en cisma formal con la iglesia.
El año siguiente, la policía arrestó al criminal de guerra francés fugitivo, Paul Touvier, que durante años había sido escondido por la orden en un monasterio de la SSPX en Niza, Francia. Después se declaró a Touvier culpable de ordenar la ejecución de siete judíos en 1944.
También en 1989, uno de los "obispos" de Lefebvre, el inglés Richard Williamson, dio un discurso en una iglesia canadiense en el que desaprobaba la supuesta persecución del negador del Holocausto y neo-nazi Ernst Zundel, por parte del gobierno canadiense. Williams, el entonces prior del seminario principal de Norte América de la SSPX de Winona, Minn., le dijo a la audiencia: "no hubo ni un judío muerto en las cámaras de gas. Fueron todas mentiras, mentiras, mentiras". El gobierno canadiense reaccionó y prohibió todas las publicaciones de la SSPX.
En el curso de la pelea con el Vaticano, Lefebvre se convirtió en un héroe para muchos, y emergió como el crítico principal del mundo hacia las reformas de la iglesia que acabaron con la Misa en latín y acercaron al catolicismo a otras religiones. Ya a mediados de los años 70, los sacerdotes ordenados por el arzobispo estaban poniendo en marcha capillas y seminarios en los Estados Unidos. Hoy las operaciones estadounidenses de la SSPX con base en Kansas City, Kan., poseen 103 capillas y 25 escuelas, además de la Angelus Press de Kansas City. El erudito Michael Cuneo estimó que la SSPX tiene hasta 30.000 adherentes en los EE.UU.
Es en The Angelus, publicado mensualmente por la editorial de la SSPX y en el sitio web de la SSPX, donde el antisemitismo radical de la orden es más evidente hoy en día. Un ejemplo actual del sitio web es un artículo del Angelus escrito en 1997 por los sacerdotes de la SSPX Michael Crowdy y Kenneth Novak, que hace un llamamiento para encerrar a los judíos en ghettos porque "se sabe que los Judíos matan Cristianos". También se culpa a los judíos por la Revolución Francesa, el comunismo y el capitalismo; se sugiere que la conspiración judeo- masónica ha destruido a la iglesia católica; y se describe al judaísmo como "enemigo de todas las naciones".
Otro documento que se reproduce en el sitio web actual de la SSPX es una carta de 1959 de un amigo íntimo de Lefebvre, el Obispo Gerald Sigaud, que también rechazó las reformas del Vaticano II. El Obispo Sigaud escribió: "el dinero, los medios y la política internacional están en gran parte en manos de los Judíos". Los que han dado a conocer los secretos atómicos de EE.UU. fueron ... todos judíos. Los fundadores del comunismo eran judíos".
La Angelus Press vende volúmenes antisemitas como The Jew/Los Judíos de Hilaire Beloc, que culpa a los judíos del bolchevismo y las prácticas económicas corruptas, y Freemasonry Unmasked/Francmasonería Desenmascarada de Monseñor George Dillon que pretende explicar el complot judeo- masónico de siglos para destruir a la Iglesia Católica. Entre las publicaciones más recientes de la SSPX se incluye el panfleto de 2005 Time Bombs of the Second Vatican Council/ Bombas de Tiempo del Concilio Vaticano Segundo de Franz Schmidberger, el ex jefe superior de la SSPX. Schmidberger denuncia a la inmigración del Tercer Mundo a los países Occidentales como "destructiva de nuestra identidad nacional y, además de la Cristiandad entera," y acusa a los judíos de deicidio.
Otros extremistas que publicaron en las páginas de The Angelus (y continuaron con el sitio web actual de la SSPX) son el Padre Denis Fahey, fallecido; John Vennari, jefe de Catholic Family News y Robert Sungenis, el líder particularmente virulento de Catholic Apologetics Internacional/La Internacional del Perdón Católico .
A pesar de todas estas evidencias, la SSPX niega todo tipo de acusaciones de antisemitismo.
Pero incluso algunos compañeros tradicionalistas radicales acusaron a la SSPX de eso y cosas peores. Fidelity/Lealtad, revista de E. Michael Jones, hombre de línea dura, (véase perfil de Culture Wars-Fidelity Press) acusó en 1992 a uno de los líderes principales de la SSPX de Kansas City de idolatrar a Hitler y promover el Nazismo entre los estudiantes. Aunque el hombre al que acusó Fidelity negó de manera vehemente los cargos, los estudiantes que cita Jones sostuvieron las acusaciones.
En los últimos meses, el Papa Benedicto XVI ha extendido una rama de olivo a los miembros de la SSPX, invitándolos a regresar a la iglesia. Pero los líderes de la secta rechazaron de plano la sugerencia. Como resultado, Benedicto aprobó en septiembre un instituto para sacerdotes franceses que dejaron el movimiento. La movida del papa marcó el final efectivo de los esfuerzos del Vaticano por traer de vuelta a la secta SSPX al redil católico.